sábado, 31 de diciembre de 2011

Para la niña del 31 de diciembre.

Hoy es tu día, ¿sabes? Porque mientras todo el mundo se despedía de 1995 llegabas tú para darle sentido a ése último día. ¡Y menos mal que llegaste! Menos mal, porque pocas personas hay en este mundo que hayan calado tan hondo en mi corazón como tú. Tú eres una amiga de día a día, por poco que nos veamos, sé que estás siempre. Hemos pasado por mucho juntas en la distancia y no puedo borrarlo de mi memoria sin más, como si no hubiera ocurrido, porque está presente en cada día. Te quiero. Te quiero porque eres especial y porque con tu dulzura y tu gracia personal haces que sea especial todo lo que te rodea, porque estás ahí para mí cuando te necesito y también cuando soy feliz, porque confías en mí y ése es uno de los mejores regalos que alguien puede darme y porque eres tú, mi pequeña, mi Tour Eiffel, mi coruñesita. No te olvido este año como no te olvidé ninguno desde que te conocí, tampoco pienso olvidarte. Gracias por todo, pequeña, espero que este sea sólo un año de todos los que pasemos juntas. Feliz 2012 y, sobretodo, feliz cumpleaños, Mònic.

1 comentario:

Twitter