domingo, 11 de diciembre de 2011

¿Y qué si no puedo creerte?

¿Conoces ésa canción que dice: "Saying I love you it's not the words I want to hear from you"? Es todo lo que yo quiero decirte, a veces, que no (me) digas te quiero. No lo digas. Pasa todo el día sin decirlo ni una sola vez, ni en un soplo ni en un suspiro, porque dos míseras palabras no van a hacer que el amor crezca de la nada. ¿Y si, en vez de decir(me) te quiero, me quieres de verdad? No te haces una idea de todo lo que éso cambiaría. Somos como estrellas, ¿sabes? Puntos de luz en la oscuridad. Todos hemos sentido la necesidad de apagar la luz, aunque dé miedo, y no ver nada. Todos nos hemos acurrucado en la infinita oscuridad para reír, para llorar, para amar, para pensar, para ser libres. Sí, todos lo hemos hecho. Hazlo una vez más, sólo una más. Abrázate a la oscuridad y ámame, hazlo de verdad. No digas te quiero, ámame. No es tan difícil, creo. Sólo hazme ver con caricias lo que me ocultan las palabras, lo que me ocultas con palabras. Haz que tiemble y me enamore. Haz que no sepa contar, ni del derecho ni del revés, porque no haya nada que contar, porque nada importe: ni las historias, ni los números, ni los meses, ni los años, ni cuántos te quiero vacíos he tenido que sentir. Déjame ver en el fondo de mí la razón por la que me enamoré de ti. Déjame soñar. Haz algo, por favor. Reinvéntate, reinvéntame, reinventa(nos). Saca lo bueno que hay en ti, lo bueno que hay en nosotros, devuélveme la razón por la que vivía. Crea nuestra historia desde cero. Deja los te quiero por rutina y crea un punte entre nuestros corazones. No digas te quiero, demuéstralo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Twitter